¿Cuantas veces la mañana después despertaste sobresaltado y te has arrastrado hasta tu móvil deseando que todo haya sido un mal sueño? Es en ese preciso instante en que miras la agenda de llamadas salientes o el buzón de salida de los SMS cuando tomas conciencia de que has vuelto a hacerlo otra vez: has llamado o enviado un SMS bajo los efectos del alcohol, con las nefastas consecuencias que eso suele conllevar.
¿Por qué si la humanidad ha sido capaz de enviar a uno de nosotros a la luna y de hacer que el tiranosaurio de Parque Jurásico pareciera de verdad no ha inventado, te preguntas, algo para evitar este eterno retorno?
Pues sí que lo ha hecho.
Virgin Mobile Australia podría salvar tu alma. Solo tienes que mudarte a un país en el que te puedes encontrar una zarigüella en la caja de cereales o una tarántula en los calzoncillos o ser atacado salvajemente por un koala mutante con mala leche sin motivo aparente.
Yo creo que todo ello sale a cuenta porque al otro lado de la balanza está este maravilloso servicio de telefonía móvil: Dialling under the influence. Básicamente consiste en que, previendo una más que probable actio libera in causa provocada por el abuso del alcohol (o cualquier otra sustancia), es el propio titular de la línea el que, previamente, activa el servicio. Entonces el operador bloquea (literalmente blacklisting) el número que se elija evitando que llames o mandes un SMS psicópata totalmente ciego (o en cualquier otro estado provocado por cualquier otra sustancia) a tu novia, ex novia, rollete, jefe, ex jefe, suegra, dentista, etc. El servicio se desactiva a las seis de la mañana del día siguiente, cuando se supone que vuelves a ser persona.
Es el descubrimiento más útil desde el fuego o los post it.
Sin embargo, como todo buen sistema, éste tiene su quiebra: se supone que puede desactivarse con un código para casos de emergencia y digo yo que, mira, eso es incongruente puesto que precisamente en ese momento tal llamada o tal SMS te parecen lo más urgente del mundo ¡copón!
Es probable, solo probable que al inimputable aún le quede el suficiente uso de razón para desactivar el servicio y arruinar su vida. Yo pienso que debería salirte un contestador automático de esos de asistencia al cliente, podría ser algo así como: "Si desea insultar a su novia: marque uno... Si desea decirle que la quiere mucho: marque dos... (bip...) Ha elegido vd. insultar a su novia. Si desea decirle que es una zorra: marque uno. Si desea decirle que cómo ha sido tan puta para hacerle eso: marque dos...". Y así sucesivamente.
Así seguro que acababas durmiéndote mientras tanto, o tirando el móvil por la ventanilla del coche, o vomitándolo encima.
Por Dios... cualquier cosa menos lo de siempre...
9 comentarios:
Ah, ¿pero cómo...?
¿También estáis vosotros en la Luna?
Son ellos los que quieren que pienses eso…
¿Y si lo que quieres es llamar a una ambulancia?
¿y si en realidad te apetece llamar a una confitería?
¿y si se te ha olvidado la hora exacta de la cita del viernes con tu dentista?
O ¿y si te das cuenta de que has perdido el resguardo de la lavandería 24h donde tienes que recojer tu pijama favorito (sí, ese de Piolín)?
Vale. Pues en vez de un contestador una operadora experta que sepa distinguir que todas esos motivos que estás arguyendo no son sino meras excusas que te permitan hacer la maldita llamada y que, consiguiente y maternalmente, te prohíba desactivar el servicio... Coño, directamente que te desvíen la llamada y te pongan con tu madre...
Huy huy huy... y lo peor es que los envías y jamás obtienes respuesta y cuando te encuentras a esa persona no sabes donde meteter (o eso me ha contado una amiga, jajajaja)
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